Por qué no debemos dejar de fumar

Aunque la primera impresión de los lectores al leer este título sea de sorpresa y, al poco de pensar en ella, se les ocurra que puede ser una frase para llamar la atención y su significado no es serio, debemos insistir en que sí lo es. Al menos en nuestra opinión profesional las personas fumadoras no deben “dejar de fumar”. Naturalmente es imprescindible una explicación a esta afirmación tan radical y sorprendente.

Los médicos en general y los especialistas en Neumología y Oncología se escandalizarían si leyeran esto, aunque nos agradaría mucho que no lo hiciera. Los consejos en todo tipo de ámbitos son absolutamente contrarios: las personas fumadoras deberían dejar de fumar por los enormes riesgos que supone el consumo habitual de tabaco para su salud: cánceres de boca, garganta, faringe o pulmones son las peores consecuencias posibles, junto a otras muchas complicaciones posibles, aconsejan dejar de fumar cuanto antes.

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