Los Consultores son profesionales especializados en un campo de conocimiento, con suficiente experiencia acumulada, a quienes individuos o representantes de instituciones, solicitan asesoramiento u orientación sobre aspectos de su vida personal, de pareja o profesional, de modo que puedan mejorar o recuperar su bienestar.
La finalidad del trabajo de los Consultores es ayudar a personas a sentirse mejor en su vida. Para lograr este objetivo es necesario:
- Analizar la situación planteada: conocer los distintos elementos que explican por qué se ha perdido el bienestar original o bien los que permitirían aumentar ese bienestar.
- Informar sobre aspectos del tema objeto de consulta que la persona demandante de sus servicios desconoce o de los que tiene información errónea o insuficiente.
- Diseñar un Plan de Acción, que constituirá el Consejo Orientador. El Consultor normalmente sugerirá cambios en los procesos habituales o esporádicos de PENSAMIENTO o de ACTUACIÓN, de su cliente.
- Enseñar al cliente las habilidades necesarias para cumplir dicho Plan.
- Supervisar el desarrollo del proceso de cambio.
Para poder llegar a Consultor, el profesional deberá contar con amplios recursos profesionales, para lo cual le resultará imprescindible realizar Cursos de Especialización y Actualización Profesionales, así como, al menos, un Máster Profesional.
Lamentablemente, en España los estudios de grado y postgrado están diseñados de manera tan homogénea que resultan muy parecidos entre sí, lo cual dificulta la elección entre ellos. Sin embargo, quienes desean llegar a Consultores harían bien en valorar los siguientes criterios:
- Preferir un Máster Profesional a un Máster Oficial (universitario), ya que en el primero, el profesorado suele estar compuesto por Profesionales en ejercicio, mientras que en el segundo caso, son Profesores Universitarios con escasa o mucho menor experiencia práctica, dedicados fundamentalmente a tareas de investigación.
- Analizar el prestigio de la entidad organizadora: sus actividades habituales, los resultados conocidos de sus profesionales,…, evitando entidades que solamente -o principalmente- se dedican a organizar cursos de formación.
- Preferir un Máster Profesional organizado por entidades que realicen habitualmente actividades profesionales relacionadas con los temas de dicho Máster.
- Valorar los contenidos temáticos y la estructura del Máster. Evitar aquellos cuyos contenidos son repetición del currículo del grado, tratan aspectos teóricos, modelos teóricos ya “falsados” o superados o teorías o modelos “de moda”, pero sin suficiente evidencia empírica de sus resultados.
- Valorar las cualificaciones profesionales del profesorado: sus actividades habituales, sus publicaciones, su experiencia en los temas que tratan en el Máster.
- Por encima de todo, elegir un Máster que proporcione un gran número de posibilidades laborales, teniendo presente que la Psicología se está convirtiendo en una profesión de ejercicio eminentemente liberal.
Finalmente, quien desea ejercer como Consultor deberá pasar por un período de observación directa del ejercicio profesional en la consulta de otro Consultor experimentado, previo a otro período posterior de prácticas supervisadas por el mismo.