Una conocida frase se expresa del modo siguiente: El tiempo es oro
O, alternativamente,: El tiempo es nuestro más preciado recurso
Para desenvolvernos en la vida contamos con diversos recursos, tanto económicos, como sociales y personales: un trabajo, una pensión, una beca,…; una familia, unas amistades,…; inteligencia, simpatía, cultura,…: Pero nada de esto se puede igualar al más preciado de los recursos: el tiempo. Tiempo para hacer lo que decidamos, lo que nos apetezca, lo que necesitamos para lograr un objetivo determinado,…
Y el tiempo es algo que no se puede recuperar una vez gastado.
Podemos recuperar dinero perdido, gastado o robado. Podemos recuperar amistades perdidas o conseguir otras nuevas. Podemos adquirir nuevos conocimientos culturales o recuperar los olvidados; pero nunca se puede recuperar el tiempo pasado.
Es mencionable el título de la conocida obra de Marcel Proust: “En busca del tiempo perdido”, como un conjunto de recuerdos sobre el pasado del protagonista, quien podría considerar que algunas de sus acciones no le resultaron útiles y que podría haber ocupado ese mismo tiempo en otras más productivas y beneficiosas para él.
Diversas maneras de perder el tiempo…
(descargar pdf) Perder el tiempo